Integrantes de la Asociación Vecinos de La Boca, que monitorea la sentencia que ordenó sanear el Riachuelo, se mostraron indignados ante la posibilidad de que los jueces del máximo tribunal den por terminada la causa que en 2008 condenó al Estado nacional, a la Ciudad, a la Provincia de Buenos Aires y la Autoridad de la Cuenca Matanza Riachuelo (Acumar) por daño ambiental.
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Las palabras de los vecinos
Alfredo Alberti, presidente de la Asociación, señaló que el hecho de que “la Corte dé la espalda ahora es un golpe bajo” que no esperaban recibir “a esta altura de la contienda, después de 25 años de lucha por el Riachuelo y sus habitantes”.
Por este motivo, promovieron la demanda contra el Estado y 44 empresas que derivó en un fallo trascendental para la Justicia argentina en materia ambiental.
¿Cómo sintieron la noticia?
Alberti agregó que: “esto es un golpe en la nuca, inesperado de la Corte Suprema, cuando ellos mismos hicieron este fallo que está incumplido. No lo entendemos, no lo podemos creer. Que se confirme el cierre de la causa sería nefasto en la historia tan penosa de la cuenca”.
Para este grupo de jóvenes, el fallo de 2008 fue un momento bisagra en el saneamiento de la cuenca, aunque insuficiente por la demora y la falta de eficiencia de los funcionarios políticos en implementar los cambios.