La Cámara de Apelaciones de Trelew confirmó la sentencia contra Ricardo La Regina anunciada por el Tribunal Colegiado de Juicio de Rawson en noviembre de 2024. Esto significa que se rechazó el pedido de nulidad del proceso y la suspensión de juicio a prueba hechos por el acusado ante la masacre de pingüinos. 

La decisión fue celebrada por múltiples organizaciones ambientalistas, como Greenpeace que, además, exigió que se amplíen las protecciones al ambiente y que se continúen replicando fallos como este, de modo que los actos delictivos contra la naturaleza no queden impunes. 

Las implicancias del caso

Agregan que esta definición es ejemplar y que cuenta un precedente al sumar el término ecocidio, el cual aún no está tipificado en la legislatura argentina. Explican que, de este modo, se trazan nuevos límites ante el avance de prácticas destructivas contra los ecosistemas, incluso dentro de la propiedad privada. 

Respecto a la sentencia impuesta en primera instancia, ésta acreditaba la responsabilidad de La Regina por el desmonte de flora nativa y la apertura ilegal de caminos mediante el uso de maquinaria pesada entre agosto y diciembre del 2021. Dicho accionar resultó en la destrucción de nidos de pingüinos y la muerte de más de un centenar de ellos. El  daño es aún mayor si se considera que la colonia se encontraba en temporada de reproducción. 

Organizaciones ecologistas celebraron la sentencia y pidieron que la resolución sea tomada como ejemplo ante futuras masacres o acciones de ecocidio.
Organizaciones ecologistas celebraron la sentencia y pidieron que la resolución sea tomada como ejemplo ante futuras masacres o acciones de ecocidio.

Definición tras la masacre de pingüinos

Es así que el acusado fue condenado a tres años de prisión de ejecución condicional y se le impusieron estrictas reglas de conducta, como la prohibición de transitar con vehículos en zonas sensibles, la obligación de colaborar con tareas de restauración y la prohibición de realizar obras sin autorización ni informes de impacto ambiental. 

Del mismo modo, se ordenó el decomiso de los instrumentos utilizados durante el delito, como una retroexcavadora, ya que se reconoció su rol instrumental en la masacre contra los pingüinos.