Por un error burocrático estos animales, un macho y una hembra de puma -ambos hermanos-, quedaron varados en Colón, provincia de Buenos Aires, a más de 400 kilómetros del santuario al que fueron designados por las autoridades. Los felinos deberían estar en la ciudad de igual nombre ubicada en Entre Ríos; sin embargo, habitan un terrario pequeñísimo junto a tortugas. El mismo se encuentra ubicado en el centro de la urbe entre un estadio y dos colegios; además de estar próximo a una avenida muy transitada.
Este espacio difiere con el lugar remoto y aislado al que están destinados, con más de tres hectáreas de pastizales, agua potable y un bosque de árboles de más de 30 metros.
La historia de los pumas
Hace más de 10 años que estos ejemplares esperan vivir lejos de la civilización. Más específicamente desde que el ex zoológico de la localidad bonaerense fue inhabilitado y luego desmantelado por las múltiples denuncias de abusos y maltrato contra los animales. Fue en 2014 cuando los pumas fueron dejados a su suerte por la desidia del Estado. En un principio eran cuatro, pero dos de ellos fallecieron; el último hace poco tiempo.
- Quizás te pueda interesar: “Autoridades de Misiones rescatan lechuzas”.
El motivo detrás de esta situación es que no se habían realizado las inversiones suficientes para adaptar el espacio a la rehabilitación de los felinos. Tras años de burocracia ya están los permisos necesarios y se hizo el desembolso del dinero. Al respecto, la fundación que los recibirá debió trabajar contrarreloj para terminar el recinto lo antes posible.

Un final feliz
Si bien esta semana se iba a dar inicio al traslado, un imprevisto suspendió el plan. Se trata de un megaoperativo que deberá ser escoltado por Gendarmería Nacional y que implicará el cierre de calles.
La nueva fecha fue fijada para el próximo lunes 13 de mayo y en dirección a Tekove Mymba, un espacio que, si bien no será la verdadera libertad, sí significa mejores condiciones de vida y la no exposición al mundo humano.