Personal del Ministerio de Emergencias ruso y voluntarios removieron de las playas unas 77.928 toneladas de arena tras ser contaminada por el vertido de fueloil. El combustible derivado del petróleo provenía de dos barcos cisterna que fueron dañados por una tormenta a mediados de diciembre. A partir de ese momento, se examinaron unos 679 kilómetros del litoral en el estrecho de Kerch, en donde se rescataron 2.579 aves.

La gravedad del hecho

El derrame provocado por los cuatro tanques dañados de combustible se encuentra monitoreado desde el espacio y, simultáneamente, es controlado por grupos de inspección a pie.

El hecho no solo afectó a la costa este, ya que también en la península de Crimea se detectó un nivel menor de contaminación. En dicha área lograron sanear 48,5 kilómetros de costas, con la remoción de 229 toneladas de suelo contaminado y la recuperación de otras 168 aves.

Por su parte, los expertos del Servicio Marítimo de Rescate ruso advirtieron que el producto vertido es un tipo de combustible para calefacción, cuya densidad es como la del agua.

La problemática de la arena contaminada

En la actualidad, no se cuenta con la tecnología suficiente para sacar este producto de las profundidades del mar, por lo que la principal forma de hacerlo es recogerlo cuando las olas lo arrastraron hasta la orilla.

Desde el Ministerio de Transporte de Rusia indicaron que la arena contaminada se traslada a un depósito provisional para que posteriormente pueda ser devuelta a la playa. Para esta tarea se formaron distintos grupos de expertos destinados a encontrar el método más eficiente para limpiar la arena.