En Alemania, la población de lobos aumentó un 36% al año desde el 2001 gracias a la presencia militar. Esto fue probado por el artículo científico publicado en la revista Conservation Letters. En particular, hay menos caza furtiva en tierras militares, por lo que menos lobos mueren en comparación con áreas no militares. Ese contraste podría deberse a cómo se protegen estas regiones.

 

Los científicos sostienen que, si dejaran de funcionar estas bases de entrenamiento militar, sería conveniente que fueran declaradas reservas naturales con estrictas regulaciones en lo que al régimen de caza respecta.

 

Fuente: La Vanguardia y Nation