En los últimos años se han identificado unos 200 compuestos químicos orgánicos sintéticos disueltos en aguas residuales procedente de productos farmacéuticos, de higiene personal, pesticidas o retardantes, entre otros, de los que existe una importante falta de información sobre los efectos de la exposición crónica de éstos y una creciente preocupación tanto en el ámbito científico como social.

 

El actual tratamiento de aguas residuales es ineficaz para eliminar este tipo de contaminantes, por lo que desde el ámbito investigador se están buscando nuevos métodos capaces de minimizar el impacto de estos químicos emergentes con tratamientos novedosos.

 

En este sentido, las microalgas han demostrado un gran potencial para desintoxicar contaminantes orgánicos e inorgánicos, usando para ello una serie de tecnologías de cultivo de microalgas a gran escala.

 

Para avanzar en este conocimiento, investigadores de la Universidad de Sydney en Australia han publicado recientemente en ‘Water Research’ una revisión sobre cómo pueden emplearse las microalgas para la biorremediación de contaminantes emergentes, así como las oportunidades y los retos pendientes.

 

Según señalan, la descontaminación del agua se puede hacer por bioadsorción, que es el mecanismo a través del cual el contaminante se pega a la microalga; la bioabsorción, que implica la incorporación en la célula del compuesto químico; y la biodegradación, por la que se transforma el compuesto en moléculas más simples a través de degradación metabólica catalítica. 

 

Dentro de estas tres opciones, la biodegradación proporciona una de las tecnologías más prometedoras para la remediación de contaminantes preocupantes, ya que pueden transformar éstos en compuestos menos tóxicos en lugar de actuar como biofiltros, que sería el caso de los otros dos.

 

Sin embargo, y como señalan, aún se necesita más investigación para explotar las especies de microalgas para las propiedades de biorremediación, ya sea en el ámbito de la bioadsorción, de nuevas enzimas biodegradables mejoradas y condiciones de crecimiento optimizadas.

 

Fuente, Mis peces