Esta semana miles de peces muertos cubrieron las costas de Volos, una ciudad portuaria. Los mismos se desplazaron por toda la urbe debido a las intensas inundaciones, causando -a su vez- una gran capa plateada de cadáveres y hedor, lo que se está convirtiendo en una grave crisis ambiental para sus residentes. 

Según explican los especialistas, los propios anegamientos que afectaron a la región de Tesalia fueron los responsables de los decesos. Detallan que estos eventos provocaron que las aguas dulces -de los lagos y ríos- y las salobres -del mar- se mezclaran, lo que resultó en miles de fallecimientos por causa de la salinidad.  

¿Qué hacer con los peces?

Las autoridades advierten que se encuentran en una carrera contrarreloj para retirar las toneladas de pescado, antes de que la situación empeore por la putrefacción, ya sea por la mayor presencia de bacterias entéricas -que podrían impactar contra los humanos y contra los animales-, por la aparición de enfermedades zoonóticas, o por la llegada de fauna carroñera que pudiese generar daños. 

Asimismo, temen que esta situación perjudique al sector turístico y gastronómico, lo que representaría miles de dólares en pérdidas. En ese sentido, ya se están desplazando barcos pesqueros destinados al arrastre de los cuerpos con la ayuda de redes; también se han implementado camiones.

 Las autoridades locales recurren a pesqueros y camiones para retirar los cadáveres de peces del puerto.
Las autoridades locales recurren a pesqueros y camiones para retirar los cadáveres de peces del puerto.

Avances y ayudas

Hasta este viernes se logró la recolección de más de 40 toneladas. Sin embargo, y pese al rápido actuar del Estado, la alcaldía acusó al Gobierno de no haber tomado medidas preventivas, como una red protectora. Al respecto, la fiscalía ordenó una investigación para determinar responsabilidades.   

Por su parte, las autoridades locales y expertos en ambiente expresaron su preocupación por las inundaciones cada vez más intensas y frecuentes que se vienen dando por causa del cambio climático. En ese sentido, advierten que las ciudades costeras deben empezar a prepararse para enfrentar estos eventos -como el de la mortandad de peces- y sus consecuencias.