Este martes se dio inicio al juicio por el vertido de lodos tóxicos de la mina del grupo sueco Boliden en Aznalcóllar, Andalucía.
Tras más de 20 años de procesos judiciales, se evaluará quiénes son los responsables de la rotura de un dique que provocó el vertido al río de más de cinco millones de metros cúbicos de lodos contaminados que contenían metales pesados como arsénico y mercurio.
Tras más de 20 años de procesos judiciales, se evaluará quiénes son los responsables de la rotura de un dique que provocó el vertido al río de más de cinco millones de metros cúbicos de lodos contaminados que contenían metales pesados como arsénico y mercurio.
Por su parte, Boliden negó siempre su responsabilidad en los hechos y acusó de los mismo a una filial de la constructora española de Dragados, que constituyó el embalse.
Las autoridades de la región de Andalucía señalaron en un comunicado que esperan «que se haga justicia en uno de los mayores desastres ecológicos que ha conocido Europa», y reclaman 89 millones de euros (97 millones de dólares) a la multinacional sueca, lo que costó la limpieza de la zona.
En el plano administrativo, la empresa noreuropea recibió una multa de más de 45 millones de euros del gobierno español en agosto de 2002, una cantidad que se negó a pagar en ausencia de una condena judicial.