Utilizando herramientas biotecnológicas se logró reproducir en laboratorio algunas de las especies arbóreas nativas de la Selva Misionera que se encuentran en peligro de extinción. Se trata de uno de los tantos aportes científicos que se han gestado para ser utilizados en programas estratégicos de recuperación de especies en peligro.
Sólo queda un 7% de la superficie original de la selva. Mientras que en Paraguay y Brasil ha sido prácticamente destruida, la mayor parte remanente se encuentra en la Argentina, donde ha ido disminuyendo desde una superficie inicial de más de 2 millones de hectáreas hasta tan sólo unas 40.000 hectáreas de selvas prístinas. Frente a esta situación límite, la ciencia realiza un aporte elemental para salvarla.
Fuente, Argentina Investiga