Cada 28 de junio conmemoramos este día, instaurado en 1971 por el Congreso Forestal Mundial, foro dedicado al debate de los desafíos clave que tiene por objetivo la generación de estrategias para la protección de esas áreas.

Fundamental para la vida

Los recursos forestales son fundamentales para el sostenimiento de la vida en todas sus formas gracias a los servicios ecosistémicos que brindan: son parte del ciclo del agua, evitan inundaciones, brindan oxígeno, capturan dióxido de carbono, son hogar de distintos animales y permiten el desarrollo de otras especies de flora.

Sin embargo, estas áreas se encuentran muy deterioradas, y cada vez son más escasas. Un estudio de la Universidad de Jaén (España) destaca que “los bosques urbanos desempeñan un papel crucial en la mejora de la calidad del aire al reducir la temperatura, filtrar contaminantes directamente y disminuir el consumo energético de los edificios cercanos. Esto a su vez reduce las emisiones de contaminantes provenientes de las fuentes de energía eléctrica”.

Los beneficios que traen

Por su parte, ONU Hábitat publicó un documento en el que se resaltan siete formas en las que los árboles y bosques urbanos contribuyen a mejores ciudades:

El árbol puede tener una infinidad de dimensiones y formas de valorarlo, lo cierto es que es una fábrica natural de oxígeno que no descansa
El árbol puede tener una infinidad de dimensiones y formas de valorarlo, lo cierto es que es una fábrica natural de oxígeno que no descansa
  • Ya mencionamos que los árboles ofrecen seguridad a plantas y animales. Esto ocurre también en las zonas urbanas.
  • Un árbol maduro puede captar hasta 150 kilos de gases contaminantes.  En las áreas urbanas esto se traduce en una mejor calidad del aire.
  • Son considerados filtros naturales para las partículas finas, tan dañinas para nuestro sistema respiratorio.
  • Pueden reducir la temperatura del aire entre 2 y 8 grados centígrados. Destacan que, ubicados alrededor de los edificios, pueden disminuir el uso del aire acondicionado en un 30 %. En invierno, evitan que sea necesario calefaccionar tanto la vivienda.
  • Vivir cerca de áreas verdes mejora la salud física y mental. Esto impacta positivamente en la presión arterial, a la vez que disminuye el estrés.
  • También mencionamos anteriormente la regulación del flujo de agua y su vínculo con la prevención de inundaciones. Un árbol maduro de hoja perenne puede interceptar más de 15.000 litros de agua al año.
  • La última ventaja destacada en este trabajo puede sorprenderlos un poco, pero se confirmó su realidad: la planificación de paisajes urbanos con árboles puede incrementar el valor de la propiedad hasta en un 20 %.

Por eso, en el Día Mundial del Árbol, revinculémonos con las áreas forestales y exijamos a los Gobiernos políticas ambientales y urbanas que las contemplen.