Las 7 maravillas naturales argentinas son el resultado de aunar un esfuerzo organizacional y el de múltiples voluntades individuales y colectivas, todas con la vocación de establecerlas como marca de la sensibilidad y deseo de todos los que habitan la Argentina, para que esas maravillas trasciendan y sean celebradas en el tiempo.

 

La campaña organizada por la fundación New 7 Wonders of the World, la misma que coronó a las Cataratas del Iguazú como unas de las maravillas mundiales, buscó promover la calidad ambiental del país, fomentar el conocimiento masivo de lugares de imponente belleza natural y difundir el patrimonio cultural con el que cuenta.

 

Las siete maravillas naturales argentinas son:

1- Salinas Grandes, Jujuy

Es el tercer salar más grande de Sudamérica con una extensión mayor a las 12 mil hectáreas a cielo abierto. Este inmenso desierto ubicado a 4.000 metros de altura tiene su origen entre cinco y diez millones de años atrás, cuando la cuenca se cubrió por completo de aguas provenientes de un volcán. La paulatina evaporación de este líquido y sus componentes es lo que dio posterior forma a este salar que posee una costra cuyo espesor promedio es de 30 centímetros.

 

2- Glaciar Perito Moreno/Parque Nacional Los Glaciares – Santa Cruz

Esta masa de hielo está ubicada en el departamento Lago Argentino. El Perito Moreno muestra un fenómeno que le provee de una fuente de espectacularidad: sus hielos avanzan sin cesar, lo cual da origen a la ruptura y desprendimiento de gigantescos bloques de hielo en su frente de 5 km de ancho, lo que le dio fama mundial, y es fuente de bautizo del Canal de los Témpanos, lugar en el cual navegan los fragmentos de hielo de proporciones épicas. El ruido de estas rupturas fue comparado con el sonido del trueno. Las masivas se reanudan, cíclicamente, cada tres o cuatro años.

 

3- Parque Nacional Talampaya – La Rioja

Formada a expensas de la erosión, la región acuna el río que cruza el cañón de Talampaya y baña las costas encajonadas del pedregal. Los bruscos cambios de temperatura generaron un cincelamiento natural, lo que produjo la rotura de grandes placas tectónicas. Estas son testigos de más de 250 millones de años de evolución.

 

4- Selva Misionera – Misiones

Valles, ríos, frondosa vegetación subtropical y hasta sierras, que llegan a los 800 m de altura, dan forma a un bosque lluvioso y húmedo que ocupa más de un 35 % del territorio misionero. Es una de las ecorregiones más biodiversas del planeta y también una de las áreas naturales más amenazadas debido a los continuos desmontes. Hogar del yaguareté y del tatú carreta, en su espacio conviven más de 400 especies de aves que inundan el follaje de árboles gigantes.

 

5- Río Mina Clavero – Córdoba

En pleno territorio del Valle de Traslasierra impera el río Mina Clavero. Su naciente en la Pampa de Achala es el producto de la confluencia de riachuelos y arroyos que lo hacen fresco, cristalino y torrentoso. Sus aguas frías, mineralizadas gracias al corredor de roca, tienen fama de ser curativas.

 

6- Parque Nacional Nahuel Huapi – Neuquén/Río Negro

Bosques húmedos y fríos, nieves eternas en sus cerros más icónicos y una gran variedad de lagos, arroyos y ríos conforman un paisaje excepcional. Compartido por las provincias patagónicas de Neuquén y Río Negro, es el parque nacional más antiguo del país. Su origen se remonta al año 1903, fecha en que el perito Francisco Pascasio Moreno donó a la Nación una extensión de tres leguas cuadradas, ubicadas en el límite de los territorios de Neuquén y Río Negro, en el extremo oeste del brazo Blest del lago Nahuel Huapi.

 

7- Bañado La Estrella – Formosa

Es el segundo humedal más grande de Argentina. Ubicado al norte de la localidad de Las Lomitas, se encuentra inundado la mayor parte del año por las lluvias y los desbordes del Río Pilcomayo. Las 400.000 hectáreas (en 300 kilómetros de largo y de 10 a 20 km de ancho) del Bañado lo convierten en el tercero en cuanto a superficie en el Cono Sur, luego de El Pantanal (Brasil) y los Esteros del Iberá. Es una joya cuya preservación resulta vital para una gran multitud de seres vivos con cada vez menos terrenos silvestres en los que vivir.

 

Fuente: Infobae