INTA AMBA se encuentra trabajando en la implementación de corredores bio-culturales urbanos que tienen como beneficio “generar servicios ecosistémicos y el hábitat para animales (…) que puedan saltar de monte en monte para permanecer o visitar los espacios naturales”. 

En la página oficial del gobierno nacional afirman que “las prácticas de manejo que se proponen implican, desde lo económico, un menor costo para el productor; y desde lo ambiental, un sistema más sustentable”. 

Implementación

En ese sentido, Rosana Gutiérrez, de la agencia Escobar del INTA AMBA, explicó que “este tipo de corredores son clave para atraer polinizadores, generar barreras de protección, atraer a la fauna benéfica y permitir que la fauna local circule por esos espacios”.

Tal como expresan, “un corredor biológico es un espacio geográfico delimitado como un camino que une montes, parches verdes o árboles a distintas distancias, con el objetivo de permitir conectividad entre paisajes, ecosistemas, hábitat naturales o modificados que poseen características ambientales semejantes, y asegura el mantenimiento de la diversidad biológica, los procesos ecológicos y evolutivos, contribuyendo a una producción sostenible”.

¿Qué especies participarán del corredor?

Según consigna la web oficial, los árboles nativos que se plantarán son, entre otros: espinillos, talas, molles, coronillos, algarrobos. De este modo, esperan establecer hábitos de floración a lo largo del año. 

El proyecto se centra, además, en el armado de estrategias de restauración y conservación de ambientes deteriorados, desconectados y poco diversos, visibilizando la problemática con actividades de plantaciones, capacitaciones, talleres y charlas.