La Guardia Civil intervino más de 23 toneladas de pesticidas que habían sido falsificados y distribuidos en el sector agrícola y que presentaban una grave amenaza para la salud pública, la flora, fauna y los campos de cultivo.

Según informaron en un comunicado, hay 10 personas detenidas e investigadas en distintas provincias por el uso ilegal de estos productos fitosanitarios (pesticidas ilícitos o falsificados) que eran empleados principalmente en el sector agrícola, pero también en silvicultura y horticultura.

En el marco de la Operación SILVERAXE VII, desarrollada en coordinación con EUROPOL y cuya misión principal es la lucha contra la fabricación, distribución, comercio y uso irregular de medios fitosanitarios, la Guardia Civil llevó a cabo un total de 1.084 inspecciones y practicó 434 controles.

Se ha detectado la presunta comisión de 21 infracciones penales, entre las que destacan delitos de falsedad documental, delitos relativos al mercado y los consumidores, contra la salud pública y pertenencia a grupo criminal. Además, se detectaron 480 infracciones administrativas a las normativas de sanidad vegetal y fitosanitarios, sobre actividades clasificadas y de residuos y vertidos. Con todo ello, se aprehendieron un total de 23.653 kilos de productos irregulares.

El uso tradicional de los productos fitosanitarios protege los cultivos y plantas contra plagas y con ellos se obtiene un aumento en el rendimiento de la agricultura y se asegura una buena calidad en los alimentos, pero los compuestos químicos que contienen pueden producir efectos adversos sobre los organismos, por lo que requiere de una aplicación controlada.


Fuente: La Vanguardia