La actividad humana causó casi el 90 % de los incendios forestales de Estados Unidos en 2017, que dejaron pérdidas de más de 18 mil millones de dólares, según un estudio difundido por la Universidad de Colorado.

El estudio destacó que la temporada de incendios en 2017 duplicó en tamaño a la de 2016. Según los investigadores, dirigidos por la doctora Jennifer Balch, la idea es “proveer información para que quienes toman decisiones consideren medidas que prevengan o minimicen futuros desastres por incendios“.

El estudio también explica que, debido a las actividades humanas, la temporada de incendios forestales o de campos ahora dura tres veces más.

La investigadora también recalcó que el año pasado vieron una acumulación de eventos extremos en grandes áreas del oeste de Estados Unidos: el invierno más húmedo, el verano más cálido y el otoño más seco, y que todo eso ayuda a promover los incendios forestales.

El estudio busca entender los elementos que al combinarse propician los incendios forestales y también “mejorar el sistema de predicción y alerta”.

Fuente: Efe VErde