Celebramos el Día Mundial de los Océanos para recordar a todo el mundo el gran papel que los océanos juegan en nuestras vidas. Son los pulmones de nuestro planeta, que generan la mayoría del oxígeno que respiramos. Asimismo, sirve para concienciar a la opinión pública sobre las consecuencias que la actividad humana tiene para los océanos y para poner en marcha un movimiento mundial ciudadano a favor de los océanos.

Este día quiere movilizar y unir a la población mundial entorno al objetivo de la gestión sostenible de los océanos, que son una fuente importante de alimentos y medicinas y una parte esencial de la biosfera.

En deninitiva, esta celebración es un buen motivo para celebrar juntos la belleza, la riqueza y el potencial de los océanos.

Este año, bajo el lema «Limpiemos nuestros océanos», la celebración gira en torno a iniciativas para prevenir la contaminación por plástico y proponer soluciones para unos océanos más limpios.

La polución por plástico está causando enormes daños a nuestros recursos marinos, entre otros:

  • El 80 % de la contaminación en los océanos está causada por los seres humanos.
  • 8 millones de toneladas de plástico al año acaba en nuestros océanos, causando estragos en la vida silvestre, la pesca y el turismo.
  • La contaminación por plástico está costando a nuestros océanos la vida de un millón de aves marinas y de 100.000 mamíferos marinos al año.
  • El plástico genera gastos de 8000 millones de dólares en daños a nuestro ecosistema marino, cada año.
El concepto de un «Día Mundial de los Océanos» fue propuesto por primera vez en 1992 en la Cumbre de la Tierra en Río de Janeiro como una manera de celebrar los océanos que comparten los países y nuestra relación personal con el mar, así como para crear conciencia sobre el papel crucial que los océanos desempeñan en nuestras vidas y las distintas maneras en que las personas pueden ayudar a protegerlos.
Fuentes: ONU e iagua.
PH: ONU.