Fue proclamado en 2011 por la UNESCO como reconocimiento del inconmensurable aporte que realiza a la democracia y al intercambio cultural. En el plano mundial, la radio sigue siendo el medio de mayor consumo. Se eligió el 13 de febrero debido a que ese día de 1946 se inauguró la Radio de la Organización de las Naciones Unidas. La transmisión se realizó desde las oficinas de la ONU en Nueva York y el primer mensaje fue: «Esta es la ONU llamando a todas las personas del mundo».
Su capacidad única de llegar a la más amplia audiencia significa que la radio puede dar forma a la experiencia de diversidad de una sociedad, erigirse como un escenario para que todas las voces se expresen, estén representadas y sean escuchadas.
La pandemia de Covid-19 erosionó la confianza en los medios de comunicación en general, principalmente debido a la circulación de contenidos falsos y de información poco precisa. Por este motivo, el tema de este año está dedicado a «La Radio y la Confianza», y se divide en tres subtemas principales:
- Confianza en el periodismo radiofónico: aumentar la confianza de los oyentes.
- El periodismo debe seguir basándose en información verificable que se comparta en aras del interés público, que exija responsabilidades y que ayude a la sociedad a construir un futuro mejor para todos.
- Confianza y accesibilidad: ser un catalizador de la integración.
- Gracias a las herramientas digitales es posible incluir a quienes anteriormente fueron dejados de lado al existir sólo la posibilidad de vincularse con la radio a través de la escucha.
- Confianza y viabilidad de las emisoras de radio: sobrevivir a las crisis financieras.
- Este subtema vincula la supervivencia económica de las emisoras a su capacidad para atraer y retener una base lo suficientemente grande de oyentes fieles como para ser sostenible o para integrar la interacción de los oyentes en sus modelos de negocio.
Entre todos/as podemos hacer de la radio un lugar democrático, enriquecedor, educativo y entretenido.