La cumbre de biodiversidad (COP16) de Cali culminó el pasado 2 de noviembre sin un acuerdo debido a una falta de quórum. Es por ello que luego de las dos semanas, la Mesa de la Conferencia confirmó que se realizarán nuevas reuniones desde el 25 hasta el 27 de febrero de 2025 en Roma (Italia).

Las sensaciones que dejó la COP16

Susana Muhamad, ministra de Ambiente y Desarrollo Sostenible de Colombia -quien ejerció como presidenta de la COP16-, indicó que trabajará junto a las partes para “construir la confianza y el consenso necesarios para alcanzar la Paz con la Naturaleza, asegurando que los objetivos y metas del Marco Global de Biodiversidad de Kunming-Montreal se traduzcan en acciones tangibles”. 

Entre los objetivos que tenía el evento se destaca la creación de un nuevo apoyo económico para la biodiversidad que no esté coordinado por el Fondo Mundial para el Medio Ambiente. Dicha meta no se pudo lograr porque del mismo participa Estados Unidos,  que en la actualidad es uno de los dos países que no han ratificado el convenio de biodiversidad.

El objetivo de los países

Frente a este panorama, los países se deberán poner de acuerdo en la próxima reunión para desarrollar una nueva estrategia de movilización de recursos destinada a garantizar 200.000 millones de dólares anuales para 2030, procedentes de todas las fuentes de financiación para iniciativas relacionadas con la biodiversidad.