Los peligros en los objetos
La contaminación por plásticos se convirtió en uno de los problemas ambientales más graves del siglo XXI. Si bien la mayoría de las personas relaciona este problema con la fauna marina y la contaminación de los océanos, pocas consideran el impacto directo que puede tener en sus propias mascotas.
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Según diversos estudios, distintos objetos cotidianos que se encuentran en el hogar representan una amenaza silenciosa pero constante para los animales domésticos.
Las distintas soluciones para esta problemática
Frente a esta problemática, adoptar prácticas seguras y cuidadosas puede marcar la diferencia en la salud y calidad de vida de estos miembros tan importantes de nuestras familias.
La composición de alimentos es un tema a tener en cuenta, ya que la comida destinada a las mascotas puede contener microplásticos procedentes de diversas fuentes. Según la ONG ambientalista Earth Day, estos plásticos pueden derivar, por ejemplo, de las etiquetas en las orejas de los animales utilizados en la producción de alimentos.
También recomiendan que los juguetes elaborados con este material estén alejados de los animales ya que, si bien muchos perros disfrutan masticando juguetes, pueden liberar químicos no comestibles.
Por último, los especialistas recomiendan utilizar productos de aseo consciente, ya que son libres de microperlas, esos pequeños gránulos plásticos que se encuentran en muchos productos de belleza. Las barras de shampoo amigables con los animales son una alternativa más segura y ecológica.