Según denunció el Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), el suministro de agua se ve limitado y está  perjudicando principalmente a los menores de edad.

Destacan que los niños y adolescentes sólo están accediendo a entre 1,5 y 2 litros de agua a diario. Cabe destacar que estos números están por debajo de los mínimos indispensables para sobrevivir.

¿Cómo impacta la escasez de agua?

Por otra parte, las familias muchas veces consumen agua procedente de fuentes no seguras. Estas pueden estar altamente salinizadas o incluso contaminadas. Es por este motivo que la mortalidad está en aumento, al igual que las enfermedades entéricas.

La preocupación está puesta en los más pequeños dado que son más susceptibles a la deshidratación, diarrea y desnutrición.

Al respecto, las autoridades regionales han registrado casi 20 veces el promedio mensual de casos de diarrea en menores de cinco años. Además también crecieron los casos de sarna, piojos, varicela, erupciones cutáneas y hay más de 160 mil cuadros de infección respiratoria aguda.

En ese sentido, responsabilizan a la guerra entre Israel y Hamas por este desastre humanitario.

Los niños de Gaza están expuestos a enfermedades entéricas por la falta de agua segura.
Los niños de Gaza están expuestos a enfermedades entéricas por la falta de agua segura.

El mundo en alerta

Desde hace más de diez semana que Gaza se enfrenta a bombardeos casi constantes, en respuesta a los ataques del grupo Hamas. Los mismos causaron la muerte de más de 1200 personas.

Esta situación se ha traducido en al menos un 50 % de instalaciones de agua dañadas. Por otra parte, ha derivado en miles de desplazados, muchos de ellos resguardados por la Agencia de la ONU para los refugiados.

¿Qué está sucediendo con el agua?

En estos momentos los sistemas de cloaca y saneamiento de la ciudad se encuentran en estado crítico. Además, los pobladores de la región también están teniendo complicaciones relacionadas a la falta de combustibles, infraestructuras dañadas, y cortes de energía.

Por otra parte, la falta de inodoros, duchas y productos de higiene en los refugios de la Franja también está provocando un aumento de la propagación de infecciones.