El gobierno de Ciudad de México lanzó al mercado financiero el primer bono de carbono forestal que emite un ejecutivo local en América Latina con el objetivo de que esta herramienta económica para empresas permita reducir las emisiones de contaminantes, así como auxiliar a los bosques.

En su lanzamiento en la Bolsa Mexicana de Valores, el alcalde de la capital, José Ramón Amieva, expuso que los ingresos de este primer bono se usarán para acciones de conservación y mantenimiento del Ejido San Nicolás Totolapan, el cual se calcula que en 5 años capturará 32.600 toneladas de carbono, que también se podrán comercializar en los mercados.

Un bono de carbono es equivalente a 1.000 kilogramos de carbono capturado disponible para comprar y vender en los mercados.

Los recursos económicos que se obtengan de la venta de bonos de carbono forestal serán depositados en el Fondo Ambiental de Cambio Climático de la Secretaría de Medio Ambiente de la Ciudad de México.

Fuente La Vanguardia.

PH: Agencia EFE.