Contenedores individuales equipados con inteligencia artificial, reconocimiento facial, análisis de basura y sensores que envían alertas cuando la basura se desborda. Además, nuevas legislaciones, cursos de educación ciudadana o multas que penalicen a los infractores son algunas de las medidas que China está llevando a cabo para fomentar el reciclaje de la basura en el hogar.
El Ministerio de Vivienda y Desarrollo Urbano-Rural anunció el establecimiento de un grupo de trabajo para redactar leyes sobre el reciclaje de basura doméstica. El objetivo marcado por China es que el 35 % se reciclen para 2020.
El presidente chino, Xi Jinping, quiere poner al cuidado del ambiente como uno de los pilares de desarrollo del país, como ha demostrado con normas como la prohibición de importar algunos residuos sólidos, la llamada «basura extranjera», que entró en vigor este año.
El Gobierno central de la urbe anunció que está investigando la posibilidad de imponer tarifas de tratamiento de basura a los hogares, en función de los residuos que produzcan.
Fuente: El Tiempo