La compañía aérea británica Hybrid Air Vehicles recibió una subvención de USD$ 1.4 millones para el desarrollo de un sistema de propulsión completamente eléctrico, a implementar en el avión más grande del planeta: Airlander 10. Según informa The Engineer, el acuerdo se celebró en el marco del programa de gobierno para el apoyo de la investigación aeroespacial del Reino Unido. Posee una longitud de 92 metros, un ancho de 43.5 metros y una capacidad de carga de diez toneladas. Con tripulación a bordo, la unidad es capaz de sobrevolar hasta por cinco días.
«La propulsión eléctrica tiene el potencial de revolucionar los aviones al proporcionar reducciones significativas en las emisiones de carbono, ruido, consumo de combustible, costos de operación y mantenimiento», manifestó Marc Holme, director de ingeniería de sistemas de transmisión de motores de Collins Aerospace. Por todo ésto, una versión híbrida y completamente eléctrica de Airlander 10 representaría un logro importante para la industria aeroespacial y la alternativa ecológica más viable de «elevar» la conciencia.
Fuente: N + 1