La aerolínea húngara de bajo costo Wizz Air lanzó un novedoso pase llamado All You Can Fly que promete a sus compradores tomar vuelos ilimitados durante un año. Según informan, a partir del 25 de septiembre comenzará a circular por un valor de 549 dólares.

Detallan que este servicio ofrece hasta 3 pasajes por día reservados dentro de las 72 horas antes del viaje, lo que lo hace ideal para quienes necesitan trasladarse de imprevisto o por trabajo. Se trataría de una iniciativa que promete mayor flexibilidad para quienes se mueven en el radio de la Unión Europea y parte de Medio Oriente. 

Comodidad vs. el planeta

Pese a plantearse como una solución para los viajeros solitarios, los grupos ecologistas se han mostrado preocupados por esta dinámica y las posibilidades de que se extienda a otras compañías. Explican que el sector aeronáutico es de los más contaminantes del mundo, en parte, porque se continúan empleando combustibles fósiles en los aviones.  

Asimismo, señalan que varios países del continente están intentando implementar políticas que limiten la cantidad de vuelos dependiendo las distancias y ponderando la utilización de su sistema internacional de trenes. En ese sentido, destacan que la iniciativa de Wizz sería un claro retroceso en los esfuerzos globales por disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero.

La respuesta de la aerolínea

Ante estos comentarios lanzados por varias organizaciones, la empresa aeronáutica aclaró que su propuesta posee algunas limitaciones destinadas a evitar el abuso de los consumidores, para que este pase sea utilizado de manera responsable. Por ejemplo, explican que luego de tres cancelaciones éste sería anulado a modo de evitar reservas innecesarias y vuelos vacíos. Por otro lado, destacan que la flota de aeronaves que poseen son las más eficientes del mercado. 

Sin embargo, los ambientalistas siguen sin estar de acuerdo con lo planteado y recuerdan que esta aerolínea, al igual que el resto de las low cost -que se encuentran en constante expansión-, impulsa el pésimo récord ambiental del sector, de acuerdo con un reporte elaborado por Transport & Environment