Un estudio elaborado por científicos en los Estados Unidos predijo que la capacidad de adaptación fenotípica a la temperatura del mosquito transmisor del dengue, podría impactar fuertemente en la incidencia de esta infección en Latinoamérica y el mundo.
De acuerdo a los autores, se trata de la capacidad del organismo de ajustar su ciclo de vida en función del cambio climático, un aspecto que hasta ahora había sido subestimado por los modelos que evalúan el impacto de este fenómeno en relación a las enfermedades.
Ni el cambio climático los detiene
Explican que el Aedes aegypti tiene especial facilidad para amoldarse rápidamente a los cambios, lo que plantea desafíos adicionales para el control del dengue, chikungunya y zika, entre otros virus de los que el mosquito es vector.
- Quizás te pueda interesar: “El cambio climático podría ser un factor clave en los incendios de Chile”.
Los resultados se basaron en la investigación de insectos recolectados en algunas regiones de México y de una colonia de laboratorio utilizada como referencia.
Los investigadores destacan que ya ha habido cambios en la distribución de estos insectos en todo el planeta, lo que ha resultado en cambios en los patrones de riesgo de enfermedades. Tanto así, que está habitando zonas donde antes no existía, llegando a captar la atención del Instituto de Investigación Científica de Especies Invasoras de la Universidad de Florida.
Más mosquitos, más dengue
Las conclusiones a las que se llegaron es que se trata de un mosquito con tolerancia al cambio climático y la temperatura, que además posee rasgos biológicos relevantes como la supervivencia y la capacidad reproductiva. Por otro lado, pueden experimentar cambios significativos en tan solo 10 generaciones de mosquitos y en condiciones controladas de laboratorio.
Ante este nuevo panorama, los expertos enfatizaron la urgencia de desarrollar estrategias de control más flexibles y adaptables.