El presidente de Bolivia, Evo Morales, aseguró que está garantizado el abastecimiento de agua en ciudades como La Paz, capital administrativa del país, que hace un año sufrió racionamiento por la sequía.
Morales recordó que la sequía “afectó bastante” a ciudades como La Paz, de unos 800.000 habitantes, y aún causa “problemas muy serios” en el oriente de Bolivia, especialmente en zonas rurales.
El mandatario afirmó que las políticas de su Gobierno en recursos como el agua evitaron su privatización, al considerarlos un derecho fundamental y nacionalizarlos mediante programas que Bolivia exporta ahora “a todo el mundo”.
Evo Morales presidió la inauguración de un trasvase hasta una represa al este de La Paz en el que se invirtieron unos 14 millones de dólares, para abastecer a cerca de 300.000 habitantes de la ciudad, casi un tercio de su población.
El proyecto se enmarca en una inversión global cercana a los 67 millones de dólares, para evitar problemas de desabastecimiento como los de 2016.
Fuente: hemisferios.info/ InfoCampo