La rápida destrucción de los ecosistemas pertenecientes a este mar pone a los expertos en alerta. Según detallan, los daños se producen a causa del aumento de la población, el exceso de actividad, la contaminación y el cambio climático, hasta el punto de que el calentamiento previsto para 2100 hace 20 años podría pasar antes de 2050, según el último informe de Plan Bleu.

La situación critica del Mar Mediterráneo

Surgido en Francia en 1977, Plan Blue es una pieza clave del Plan de Acción para el Mediterráneo (PAM) del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA). Su objetivo es notificar a través de sus estudios sobre el estado del mar mediterráneo, para que los países limítrofes puedan tomar decisiones sobre el asunto.

En el reciente informe titulado MED 2050, la organización advierte que «salvo cambios importantes, el Mediterráneo estará en una situación mucho más alarmante en 2050 de la que presenta hoy, con una importante transformación de todo el ecosistema marino y una degradación general de las condiciones ecológicas de habitabilidad de todos sus ecosistemas».

Los realizadores del documento indican que entre los posibles escenarios, el más peligroso es también el más probable, por lo que señalan que se debe dotar al Mar Mediterráneo de personalidad jurídica como hizo España con el Mar Menor.

El posible escenario

Dicho escenario implicaría mantener las tendencias actuales, y se presentaría con un calentamiento de 2,3 grados en 2050 (frente a los 1,5 previstos), un aumento del nivel del mar de unos 40 centímetros y un incremento de la frecuencia y severidad de sequías, inundaciones y olas de calor.

Los autores del estudio advierten que emplear políticas basadas en pequeños pasos no permitirá evitar que se cumplan estos pronósticos, sino que es necesario trabajar con soluciones «disruptivas».