Una de las sesiones de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Biodiversidad (COP16) concluyó con la celebración de un acuerdo global destinado a identificar y proteger áreas marinas de alta relevancia para especies en aguas internacionales.

Dicho avance, conseguido luego de ocho años, ofrece un refuerzo de la gobernanza de los océanos y marca una mejora en la preservación de la biodiversidad acuática.

La importancia de las áreas marinas

Susana Muhamad, presentadora del evento y ministra de Ambiente de Colombia, remarcó la importancia de proteger a los océanos y señaló que este compromiso asumido representa el espíritu de cooperación y responsabilidad que se busca impulsar.

El acuerdo establece que el Grupo Asesor Internacional, conformado por expertos de diversas regiones, se encargará de identificar y describir las Áreas Marinas de Importancia Ecológica y Biológica (EBSAs, por sus siglas en inglés), en base a criterios científicos y técnicos.

Un esfuerzo realizado en conjunto

Para lograr este objetivo, el proyecto contará con la financiación de países como Alemania, Canadá y Suecia, quienes se comprometieron a invertir en talleres científicos y técnicos en los que participarán expertos y representantes comunitarios.

De este modo, la COP16 reafirma la necesidad de usar sosteniblemente los recursos comunitarios a partir de un  enfoque que reconozca el valor de la cooperación para enfrentar los desafíos globales.