Una nueva investigación liderada por expertos de Noruega y Reino Unido, y publicada en la revista Nature Geoscience, asegura que las proyecciones de las Naciones Unidas -en cuanto a la peligrosidad del cambio climático- serían demasiado optimistas y que no reflejarían las verdaderas consecuencias de este fenómeno. 

Según sus predicciones, tres de cada cuatro personas, es decir, el 75 % de la población humana, se enfrentarían a eventos cada vez más extremos, duraderos y amenazantes de cara al 2040. De hecho, estiman que, aún si se lograse frenar su avance, al menos 1.500 millones de personas se verían perjudicadas.

Un ejemplo inverosímil

Para llegar a estas conclusiones los científicos tomaron en cuenta diversas informaciones proporcionadas por centros meteorológicos de todo el mundo. El dato más alarmante y revelador corresponde al Servicio Climático Copernicus de Europa que recientemente confirmó que este año se perfila como el más caluroso de la historia, según los registros. El récord anterior databa del 2023.

Problema del cambio climático

Al respecto, sugieren que las consecuencias ya se están viendo reflejadas a nivel mundial con megaincendios, inundaciones, tormentas y sequías. Los mismos fenómenos hoy son responsables de la pérdida de cosechas y de gran parte de la hambruna que se vive. Asimismo, sostienen que son condiciones que favorecen la propagación de enfermedades, en parte, porque se pierde el acceso a recursos de saneamiento, como el agua limpia y potable.

Otro ejemplo de ello es el dengue, una enfermedad transmitida por el mosquito Aedes aegypti que en el último año golpeó con fuerza al continente americano. Las últimas cifras indican un aumento del 416 % con respecto al promedio de los últimos cinco años. En este caso, la problemática está asociada al calor y las lluvias -condiciones necesarias para la proliferación del insecto vector- que se ven potenciadas por el cambio climático.