Las autoridades vietnamitas indicaron que al menos 197 personas murieron y más de un centenar siguen desaparecidas a causa de este fenómeno que además provocó numerosas inundaciones y corrimientos de tierra, especialmente en el norte del país.

La respuesta de Vietnam

El primer ministro, Pham Minh Chinh, ordenó a las autoridades del gobierno que visitaran algunos de los lugares afectados para dar instrucciones sobre el terreno, y además, pidió ayuda a las autoridades de las zonas que no fueron afectadas por el fenómeno.

Por su parte, desde la Autoridad de Gestión de Desastres señalaron que unas 100.000 viviendas han quedado completamente sumergidas y que se perdieron cerca de 200.000 hectáreas de cultivos de arroz y casi 16.000 árboles frutales. Debido a esto, el gobierno de Australia donó unos tres millones de dólares australianos en ayuda humanitaria al país asiático, tal y como anunció la ministra de Exteriores, Penny Wong.

Los daños causados

Según el gobierno vietnamita, casi 50 mil personas en el país fueron evacuadas de las ciudades costeras y alrededor de 450 soldados fueron desplegados para brindar asistencia y atender la emergencia.

Posteriormente, el tifón se trasladó a Tailandia, y hasta el momento dejó al menos seis muertos y varios heridos, además de fuertes inundaciones. Entre otros países que sufrieron el paso de este fenómeno, se destacan Filipinas y China.