Un estudio reciente, difundido por la Agencia Espacial Europea, demostró una incipiente proliferación de algas próxima al Ártico. Explican que detrás de este fenómeno estaría el cambio climático, que derrite las capas de hielo y permite la penetración de la luz solar a través de él hacia el mar.

Detallan que este régimen cambiante de luz tiene un potencial impacto en el ecosistema y que por ello se están presentando floraciones atípicas. Al respecto, temen que esta situación empeore a futuro por culpa del derretimiento. 

La situación en el Ártico

Estos organismos fotosintéticos están creciendo por debajo del permafrost y, si bien son parte de la cadena trófica -siendo el alimento principal del fitoplancton- su excesiva proliferación puede teñir las aguas, modificar el hábitat de cientos de especies y afectar su dieta. En ese sentido, los expertos sostienen que el cambio en cualquier eslabón tiene una afectación directa o indirecta sobre los otros. 

El trabajo en cuestión fue llamado CryoSat y requirió de un mapeo meticuloso sobre los organismos vivos en la región. Dado que no es posible observar las algas a simple vista, se debió estimar la cantidad de luz que llega a las profundidades del océano y así determinar su capacidad de crecimiento.