Cuando tras una fuerte nevada a principios de octubre en la prefectura autónoma tibetana de Golog la temperatura cayó a 10 grados bajo cero, la estudiante Rinchen Drolma se sorprendió al descubrir que su escuela no usaba carbón para mantener caliente el recinto.
La filial activó a finales de septiembre 12 calderas alimentadas por un generador de energía cuántica. Se trata de la primera infraestructura de calefacción con energía limpia a gran escala que China ha introducido en la montañosa región.
El programa de energía limpia fue lanzado para ayudar a preservar el ecosistema local, después de que los métodos de calefacción tradicionales como la combustión de excrementos de vaca y carbón causasen una grave contaminación.
Hasta el 20 de octubre, el proyecto alternativo ha ahorrado 176,8 toneladas de carbón, además de reducir las emisiones de dióxido de carbono y dióxido de azufre.
De acuerdo con Li Huaiyuan, gerente de la sucursal de Golog, la SGCC ha invertido en 187 instalaciones de calefacción con energía limpia en seis prefecturas de la región de Sanjiangyuan.
Fuente: hemisferios.info/ Xinhuanet