Frente a una audiencia compuesta por expertos en energías renovables, el expresidente estadounidense Barack Obama expresó su interés por la exploración del espacio, pero planteó dudas sobre los planes de establecerse en Marte como una alternativa ante un eventual deterioro ambiental en la Tierra.

Obama señaló que, aunque se llegara al peor de los escenarios, ya sea tras un conflicto nuclear o sin medidas eficaces contra el cambio climático, nuestro planeta seguiría siendo más hospitalario que el rojo.

El mundo mira a Marte

El expresidente afirmó haber defendido la inversión en la protección de la Tierra, y destacó que la exploración del espacio debe ser impulsada por la curiosidad y por el afán de conocimiento, no por la búsqueda de un nuevo hogar.

Además, en su discurso recordó sus esfuerzos en la Casa Blanca para abordar el cambio climático y fomentar la transición hacia prácticas más ecológicas. Sin embargo, evitó hacer comentarios directos sobre las acciones de su sucesor con respecto al Acuerdo de París sobre el clima.

Siguiendo el ejemplo

En cuanto a las energías renovables, Obama remarcó el trabajo que realizó Francia respecto a la producción eléctrica procedente de la energía nuclear y sostuvo que si este programa tiene tanto éxito es porque los franceses han construido varios reactores del mismo modelo. Concluyó que en el caso de las energías renovables pasa lo mismo, ya que para que funcione, hay que pasar a escala industrial.