La multinacional Bayer deberá pagar 2.250 millones de dólares luego de que un jurado le diera la razón a un granjero estadounidense que afirmó que el herbicida Roundup de la subsidiaria Monsanto fue el causante del cáncer que padece.  

El demandante es John McKivison de 49 años, quien se presentó ante la justicia de Filadelfia para reclamar por un linfoma no Hodgkin que, según el diagnóstico de los médicos, era consecuencia de haber utilizado el agrotóxico por al menos dos décadas en su campo. 

El veredicto fue unánime y el jurado encontró culpable a la filial por negligencia y por no haber advertido a sus consumidores de los peligros del producto. 

Respuesta de Bayer

Por su parte, Bayer se pronunció a través de un comunicado diciendo que apelará el fallo debido a que fue “inconstitucionalmente excesivo”. Aseveró que el veredicto no se condice con la “evidencia científica” y las evaluaciones regulatorias mundiales.

Bayer compró la filial Monsanto y desde entonces las demandas no cesan.
Bayer compró la filial Monsanto y desde entonces las demandas no cesan.

El fallo se basa en el glifosato, un ingrediente introducido por Monsanto en 1974, el mismo inhibe una enzima que está presente en la mayoría de las plantas, impidiendo su crecimiento. En paralelo a su aplicación también introdujo cultivos genéticamente modificados resistentes a este componente. De este modo se permite que los productos agrícolas crezcan sin ser invadidos por otras hierbas. 

Aceptación global

En cuanto a su uso en el mundo, la Comisión Europea sostiene que no hay evidencia para clasificar al glifosato como cancerígeno, mientras que la Agencia Reguladora de Plagas de Canadá continúa aprobando su uso. 

Por su parte, la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos encontró en 2020 que “no hay riesgos” para la salud humana.