En el municipio bonaerense de San Fernando se dio el operativo inédito, encabezado por el ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Juan Cabandié.

Desbarataron todo tipo de cueros, taxidermias, cráneos y astas de animales cuya caza está prohibida. Algunos de estos llevaban más de 20 años a la espera de ser destruidos en un horno de incineración.

Explican que los productos de la fauna silvestre destruidos fueron secuestrados en especial en los últimos años en los que aumentó la cantidad de operativos y decomisos y se sostuvo una lucha continua contra la caza furtiva, encabezada por la Brigada de Control Ambiental (BCA).

De hecho, este organismo desarrolló cerca de 6.300 inspecciones donde se capturaron estos trofeos.

Hasta ahora fueron destruidos cerca de 6.000 cueros de especies como lagarto, ñandú y pecarí y casi un centenar de piezas de taxidermias.

Se trata de la primera etapa de destrucción que continuará con más productos, aún sin fecha establecida.

Entre las especies, la mayoría son animales exóticos, como ciervo colorado, ciervo dama, ciervo axis, antílope de la india, búfalo de agua, otros antílopes africanos como kudú, oryx, niala. También, cebras, jabalíes y facoceros.

En este contexto el ministro anunció que desde la cartera presentarán un proyecto de ley para prohibir la exportación e importación, por cualquier medio de ingreso o egreso a territorio aduanero, como así también el tránsito interjurisdiccional de “trofeos” de caza derivados de la caza deportiva.