El convenio contempla la colaboración de ambas instituciones mediante el intercambio de experiencias y conocimiento, el desarrollo de investigaciones y programas de interés conjunto, y la capacitación del recurso humano de cada institución. Así, las organizaciones cooperarán en áreas como la creación y el manejo de incentivos económicos ambientales, la gestión integrada de cuencas, la disponibilidad del recurso hídrico, la calidad del aire, energías renovables, eficiencia energética, movilidad eléctrica, entre otros.
Debido a la alteración de los patrones de lluvia, el cambio climático constituye una de las principales amenazas para las fuentes de agua de la Cuenca Hidrográfica del Canal de Panamá, las cuales abastecen a más de dos millones de habitantes, además de la generación de energía y las operaciones de la vía interoceánica por donde transita aproximadamente 2,5% del comercio mundial.
Fuente, IAgua