Los ministros de Agricultura y Pesca de la Unión, reunidos en Luxemburgo, introdujeron una serie de cambios en la propuesta inicial de Bruselas para dotarla de mayor “flexibilidad” y reducir la complejidad de sus normas, de manera que sea más sencillo beneficiarse de las ayudas. Así, los 28 cerraron un acuerdo sobre el Fondo Europeo Marítimo y de Pesca para 2021-2027 que, según alertó la Comisión Europea, crea el riesgo de aumentar la capacidad de la flota y poner en peligro los esfuerzos en favor de una pesca sostenible.

 

Pese a los recelos de la Comisión Europea, los países acordaron mantener ciertas ayudas a la construcción de nuevos buques o la renovación de los motores de algunos barcos, uno de los aspectos que Bruselas rechazaba.

 

Fuente, EFEagro