El impacto del cambio climático en el continente helado se ha estudiado durante años, con algunos resultados aparentemente contradictorios sobre la pérdida de hielo. Después de analizar con detalles los datos acumulados durante 25 años por los satélites de la Agencia Espacial Europea (ESA) y un modelo del clima regional, expertos rastrearon los cambios en la cobertura de nieve y hielo en todo el continente.
El resultado más destacado del estudio es que el 24% del hielo de la Antártida Occidental se encuentra ahora en situación inestable, con pérdidas de grosor de hasta 122 metros en algunas zonas. El equipo concluye que el derretimiento del hielo oceánico -debido en parte por el calentamiento del agua marina- provocó un desequilibrio en los glaciares. Esto significa que las masas de hielo situadas sobre zona terrestre son ahora más inestables.
Fuente, La Vanguardia