El Servicio de Diagnóstico del INTA Balcarce reveló que el 56 % de la gramínea analizada en potreros del sur de Buenos Aires está infectada con un hongo endófito, llamado Epichloë coenophiala. Éste, disminuye la palatabilidad de la pastura, es decir que modifica las condiciones por las cuales un alimento es más o menos atractivo para el consumidor, ésto afecta directamente al sector ganadero.
Además la planta infectada intoxica los animales y puede reducir el desarrollo corporal en vaquillonas, disminuir la producción de leche, el peso de los terneros al nacer y el porcentaje de preñez.
Fuente, Agrofy