Ambientalistas se manifestaron en la hidrovía Paraná-Paraguay, a la altura de Ramallo, en rechazo al dragado que se está realizando por parte de la Administración General de Puertos de Argentina.

La obra, que busca permitir el paso de naves de mayor calado por la vía fluvial, está generando descontento en los vecinos y en ciertas organizaciones ambientales, debido a que el proyecto no contaría con un estudio de impacto ambiental actualizado, y la incertidumbre respecto al futuro de islas Las Hermanas.

En la actividad participaron alrededor de 50 embarcaciones, entre lanchas, botes y kayaks, y fue encabezada por la frase “Ramallo no se vende”.

En respuesta a lo anterior, el secretario de Desarrollo local, Roberto Borselli, comentó: “A nosotros también nos preocupa lo que está pasando en el río Paraná, por eso nos reunimos con la Administración General de Puertos y nos dejaron tranquilos con las respuestas. Nuestras consultas fueron evacuadas, ahora esperamos que no suceda nada extraño”.

La Vía Navegable Troncal, o “hidrovía”, es una ruta fluvial de 1.635 km que permite la salida hacia el océano a distintos tipos de naves de carga. Su traza se encuentra expresada parcialmente en los ríos Paraná, Paraná de las Palmas, y Río de la Plata.

Actualmente es un servicio concesionado de obra pública, mediante cobro de peaje, para el mantenimiento de las profundidades previstas en el pliego de la concesión mediante dragado y su respectivo balizamiento para delimitar el canal y brindar seguridad en la navegación.

Con información de Portal Porturario